5 jun 2010

El Universo conoce mis necesidades y las satisface con generosidad

Antes de empezar, quería dedicarle este post a una amiga y compañera de sendero (espero que por mucho tiempo). Para Paula.

Es increíble como funciona nuestro pensamiento, nuestra cabeza. En algún otro momento de mi vida me había planteado tener un bebé, pero nunca me parecía el momento más oportuno. Ni siquiera ahora, cuando la situación laboral, económica y anímica del país está cayendo en picado. Mi situación podría parecerse bastante a la general y aún así decidí que no importaba si no tenía trabajo, si no tenía pareja, si no tenía apoyo o si el mundo a mi alrededor se derrumbaba: yo seguiría luchando y seguiría adelante pese a todo.

Cuántas preocupaciones, cuántas inseguridades: ¿se sentirá querido? ¿le afectarán mis experiencias? ¿sabré darle lo que necesita? ¿podré ofrecerle un entorno agradable?... Espero poder formar una estructura familiar "normal", aunque eso sólo el tiempo lo dirá. Lo que tengo claro es que en mi vida yo ya no soy lo más importante. Desde que lo supe, mis necesidades, mis responsabilidades, mis ilusiones, mi presente y mi futuro, toda mi vida gira en torno a él/ella.

Paula, espero que me ayudes a entender y a seguir confiando en mí como hasta ahora porque sé que "nuestra mayor gloria no está en no haber caído nunca, sino en levantarnos cada vez que caemos". Gracias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario